Bogotá D.C. Redacción cFb

Un día recibí el siguiente mensaje en mi correo: Somos una escuela de formación deportiva al sur de la ciudad y ¿qué debó hacer para promocionar un torneo que estamos desarrollando?

Me quedó la curiosidad y empecé a investigar… ¿qué era el torneo de Vizcaya y quien lo dirigía?

 

Danilo González
Director de la Escuela

Entonces comenzaron una serie de intercambios de recados con quien se presentaba como el director de la escuela. Danilo González respondía rápidamente a mis interrogaciones desde el otro lado de la web, y como resultado de este cruce de ideas, conocí a una familia extraordinaria con un objetivo en común: el fútbol como ente social.

González me indicó si los podría visitar, para que yo conociera la escuela, el torneo, los chicos, la cancha del Portal del Sol, el barrio, la gente… su gente.

No me pareció mala la idea.

Debo confesar que estaba un poco enfermo el día de la visita. Una fuerte gripa, tan tradicional en Bogotá, me tenía hecho jirones.

La llegada fue fácil. Vizcaya - Metrovivienda en un populoso sector de la capital de la república ubicado al occidente de la localidad séptima de Bosa. Ya había visitado el complejo urbano, cuando cubrí las finales del campeonato de Fútbol de Salón del barrio Villas de Vizcaya, en el primer semestre de este año.

A lo lejos se escucha el tronar del silbato. Desde varias cuadras a la redonda, lejos de la cancha del Portal del Sol, se puede ubicar el espacio deportivo por los naturales sonidos del fútbol: Gritos de niños, zapatazos al balón, el largo y agónico pitazo del árbitro, entre otros, que evitan la necesidad de preguntar u orientarse por direcciones.

Cuando llegué había 22 niños jugando, unos con uniforme y otros con peto. Corrían y jugaban como profesionales sobre un terreno en regular estado. Este, en algunas partes destapado donde la tierra se apodera del juego, en otras la humedad ha hundido el terreno y el continuo uso la ha vuelto dura y con vacíos.
 

Escuela de Formación Deportiva Vizcaya

 

Pregunté por Danilo González, y una chica, que supe después era su esposa, extendió su brazo derecho para señalar a un señor… a un muchacho, que sobre la línea lateral occidental de la cancha observaba detenidamente el partido de aquel equipo con peto amarillo.

Nos presentamos y seguido la imagen de la Escuela de Formación Deportiva Vizcaya Metro Bosa, empezó a tomar forma.

Danilo es un joven bogotano con espíritu solidario. Tiene 30 años, mide 1,79 centímetros de estatura, es moreno, delgado, porta lentes y es muy activo. Es dueño de una sensibilidad por lo social como pocos, en especial por las juventudes, pues todo lo que hace, es pensado y meditado, por y para los niños y niñas de menores recursos.

Es egresado del Instituto Colombiano de Aprendizaje, más conocido como Incap, donde estudió Técnico en importaciones y cambios internacionales, y actualmente trabaja como auxiliar en comercio internacional para una multinacional.

Además adelanta estudios en el Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), en tecnología de entrenamiento deportivo.

Y en las tardes, en las noches y los fines de semana se entrega de lleno a sus pasiones: el fútbol, la escuela y sus pupilos.

Junto a Luis Francisco Cifuentes, fundó la escuela dos años atrás, para la cual obtuvo el reconocimiento como escuela de formación deportiva del Instituto Distrital para la Recreación y el Deporte (Idrd), bajo el AVAL No 465 de octubre 14 de 2009, para la integridad deportiva, familiar y social.

Un espacio donde más de 100 niños y niñas del sector de Metrovivienda se relacionan con el deporte. Claro, el fútbol es simplemente la escusa, o vehículo para hacer el trabajo que a él le gusta, ayudar a los chicos a reorientar la ruta… de sus vidas.

Su principal objetivo con la Escuela es usar el deporte como un medio socializador para que los chicos aprovechen el tiempo libre, aprendan como trazar metas y objetivos a corto y largo plazo, diferencien entre el bien y el mal, y se mantengan lejos de los vicios, las mañas y las malas compañías.

Además… formar y mostrar nuevos talentos para el fútbol capitalino.

Mientras hablábamos, él apasionadamente estaba pendiente del partido. El equipo de peto amarillo era la Escuela de Formación Deportiva o E.F.D. Vizcaya… sus pupilos, que enfrentaban a la escuela Ricaurte F.C., por la segunda fecha del torneo.

Entonces aproveché y le pregunté sobre el campeonato. ¿Qué es? Y seguido escuché una cascada de ideas, conjeturas y estrategias en su voz.

Me contó que con el ánimo de poner en práctica el trabajo con los sardinos, vitalizar la competitividad, y el relacionarse con otras escuelas, se formó el campeonato que vive su primera edición, I Copa Vizcaya, para menores de 15 años (97, 96 y 95) e inter – escuelas, que reúne a 10 instituciones de Bogotá (Galácticos F.C. y Bayer Munchen A y B, de la Coruña, Fundación Ángeles de Oro de Kennedy, Ricaurte F.C., Más Más, Real Zaragoza, Sporting Bolívar, y Colegio Farina) que también hablan el mismo idioma de la escuela Vizcaya: lo social.

‘Son niños de escasos recursos a quienes se les cobra una económica mensualidad (10.000 pesos), muy económico a comparación a otras escuelas donde para muchos es imposible acceder por los costos. Sin embargo, algunos no puede pagar, por falta de empleo o recursos, colaboran con lo que pueden, y otros están becados pues no tienen ningún tipo de apoyo, como por ejemplo hay niñas mamás de cabeza de familia’
La finalidad es ayudarlos, para que tengan espacios donde puedan hacer deporte, formarse como personas de bien y sean útiles a la sociedad’
Y continuó diciendo que cada balón, peto, cono, guayos, uniformes, entre otros elementos de uso diario en la escuela, se han conseguido con la colaboración de muchas personas y entidades, que han creído en la causa.
Tuve que disculparme con González pues mi tos no me dejaba escucharlo. Le pedí el favor si podíamos dialogar en otra parte, por aquello del clima, la brisa, el frío… me estaban matando.
Me dijo, camine para la sede que está cerca y allí hablamos con tranquilidad.
Asentí positivamente. Claro, pensé que la escuela debía tener un espacio donde se socialice toda actividad del grupo, donde se escuchen ideas, problemas y desde luego soluciones.
Caminamos un par de minutos, quizás menos, cuando me encontré de frente con el anuncio… Escuela de Formación Deportiva Vizcaya Metro Bosa.
Era un letrero con doble cara que se asoma sobre la entrada de una casa, y que la diferencia de las demás. Allí descansa la razón social y el nombre de Vizcaya se entremezclada con la imagen de Carlos Alberto ‘el pibe’ Valderrama, una insignia del deporte colombiano.
Resultó ser la casa de los González. Un lugar donde la amistad se combina con el ambiente deportivo y el calor del hogar.

Un lugar cálido, acogedor, que hace apología al deporte, donde el ambiente está cargado de continuas tertulias futboleras, la polémica que deja la última fecha del torneo profesional, la discusión sobre el fútbol capitalino, la pasión por Atlético Nacional, la rivalidad con otras escuelas y las infaltables charlas sobre estrategias, módulos y tácticas.

 

 

 

 

Imagen de la Razón Social
E.F.D. Vizcaya Metro Bosa
 

Ahora estábamos más tranquilos, pues la tos mermó y me dejó en paz gracias al ambiente tibio en la cual me encontraba, y González acomodado en su silla favorita, no ahorró minutos para seguir contándome sobre la escuela, sus proyectos y planes futuros.

‘Nosotros tenemos varias alianzas con otras escuelas. Por ejemplo, tenemos un convenio con el Club Deportivo Bogotá River Plate, donde los chicos que se forman con Vizcaya, tienen la oportunidad de foguearse y fichar en este club que participa en Liga. Y hay varios chicos que ya juegan para este club, y nacieron deportivamente con nosotros’

Maicol Gil es un ejemplo de este proceso, jugó con E.F.D. Vizcaya en la pasada Copa Talentos de Kennedy, donde fueron campeones, y fue fichado por la Equidad Seguros, donde ahora juega en quinta división. Gustó por su talla, buen juego, y su capacidad de acople.
O Nelson Rada un volante diez de gran nivel, tiene 17 años, trabaja en Bogotá River Plate, una persona inteligente, con talento y futuro.
Y Daniel Salamandra, que también juega en 3° división de Bogotá River Plate, un joven que sea ha convertido en un apoyo constante para la escuela. Tiene 16 años, juega de seis o defensa central, es rápido, inteligente, buen estudiante, cursa undécimo del bachillerato y desea estudiar medicina.
En total hay 10 jóvenes en equipos de Liga que se formaron con nosotros.
Agregó, que siente una gran satisfacción porque el equipo femenino de la escuela cumple una gran campaña en la Copa Telmex, el torneo para aficionados más grande de América Latina, pues ya estaban entre los mejores cuatro, jugando buen fútbol, venciendo a equipos de Liga, y convirtiéndose en un gran avance para la institución.
‘Nos enfrentamos a otras escuelas, con más trayectoria, con más años de funcionamiento, y las muchachas de E.F.D. Vizcaya, mostraron más fútbol, más inteligencia’

 

 

Equipo femenino E.F.D. Vizcaya,
Copa Telmex
 

Además, anota que tiene un convenio con el Liceo Pedagógico el Recreo, de educación primaria, donde ofrece cooperación extracurricular, para que los niños, bajo una cuota mínima - especial, tengan acceso al deporte, y asuman valores como la disciplina, ética, moral, respeto, competitividad, entre otros, que se logran con la practica del fútbol, además, con la opción para que hagan parte de cada equipo de la escuela.

Y agregó más.
Dice que E.F.D. Vizcaya, próximamente entrará a formar parte del Club Atlético Lanús de Argentina, que pretende abrir un club- escuela de formación deportiva, en Colombia, como lo han hecho River Plate y Real Madrid.
‘Aún hay muchos detalles por definir, pero la idea es hacer parte del club, tener su patrocinio, que la escuela E.F.D. Vizcaya pueda proveerlos de buenos jugadores, pues ellos pretenden entrar a la Liga de Bogotá en todas las divisiones y necesitarán de materia prima’

Sin pensarlo, remató asegurando que una de las metas de Vizcaya es estructurar mejor la escuela, con mejores procesos de formación, para que en un futuro, sus aprendices terminen en equipos profesionales, en selecciones Bogotá y Colombia, y él sienta orgullo cuando un futbolista diga que se formó en el E.F.D. Vizcaya.
Por último, González destaca que busca convertir la escuela en Fundación, para poder canalizar los recursos que generen avances en estructura y organización.
Pues dice, que desafortunadamente la colaboración de la Alcaldía Local es poca, ya que no existe un programa que apoye a las escuelas de formación deportiva como la suya… ‘no hay escenarios, no hay nada’

¿Qué me ha dejado la escuela? Repite mi pregunta, pero con la misma seguridad que dirige a sus pupilos, contesta que, muchas son las satisfacciones y alegrías que deja el fútbol, como títulos, triunfos épicos, entre otros, pero también… desánimos, tristezas y preocupaciones.

‘También amigos, muchos amigos como resultado de los procesos de formación con los niños, pues los padres de familia y la comunidad respetan y aprecian mi trabajo’

Para rematar, Danilo González presenta a cuatro de sus pupilos, grandes jugadores y amigos.

 

 

 

 Helbert Andrés Tique

Helbert Andrés Tique tiene 14 años. Es volante central y cumplió 2 años en Vizcaya. Dice que la escuela inculca importantes valores que fortalecen lo espiritual, la parte física y lo emocional... ‘nosotros venimos ha aprender, crecer como personas, para tener más confianza en si mismos y en los compañeros, pues se nos ha enseñado a pensar en equipo. Respetando siempre al rival’

 

 

Brandon Mauricio Vargas Morales

Brandon Mauricio Vargas Morales tiene 13 años, dice que en el tiempo que lleva integrando la escuela ha comprendido que la disciplina es un valor que se aplica para el logro de cualquier objetivo. Y el respeto como fuente de amistad y compañerismo.

Es carrilero por derecha, se inspira en Messi para su juego, en su posición se considera estratégico, cuando tiene el balón siempre engancha a uno o dos y suelta el balón con un buen pase.

 

 

Daniel Salamandra Perea
 

Daniel Salamandra Perea lleva dos 2 años en la escuela, opina que ésta forma personas de bien, donde se inculca valores, proyección, disciplina y trabajo.

Juega como delantero pero le gusta jugar como volante lateral, se define como un futbolista fuerte, con dominio de balón, que busca al mejor ubicado para soltarle el pase, que genera espacio para buscar el gol y se preocupa más por ayudar a la defensa.

Es bogotano, le gusta el juego de Ronaldinho gaucho, por su alegría en la cancha, y su actitud por ayuda a los demás.

 

Daniel Felipe Perdomo Alonso
 

Daniel Felipe Perdomo Alonso tiene 13 años, juega como defensa central, también hace parte del proceso con la cual arrancó la escuela dos años atrás. Dice, que Vizcaya le ha inculcado el respeto como valor primordial a mostrar dentro y fuera de la cancha, ser disciplinados en todas las tareas matutinas, y ser honestos y sinceros con todo el mundo.